Esta es la pequeña cinta que he conseguido con el "invento" que comentaba en la entrada anterior.
El artilugio no es más que la pared de una caja de fresas de madera.
Atando la urdimbre en forma circular, y poniendo lizos a modo de telar de cintura, puedo tejer cómodamente colocándolo sobre mi regazo. Además es pequeño y ligero, por lo que me es fácil llevarlo conmigo fuera de casa.
Me da para tejer una cinta de unos 9 cm., más que suficiente para hacer una bonita pulsera.